El tequila fue el primer producto mexicano en haber obtenido la Denominación de Origen en 1974.
Según reporta la Unión Europea, 60% de los consumidores están dispuestos a pagar hasta un 30% más por un producto de denominación de origen.
La industria genera empleos para más de 100 mil familias mexicanas, y tiene un valor estimado de mercado de alrededor de 7 mil 200 millones de dólares.
El tequila es un producto icónico de la cultura mexicana y, desde hace muchos años, goza del reconocimiento y la preferencia de consumidores de todo el mundo, llegando hoy en día a más de 120 países. Entre éstos destacan cinco que, en conjunto, importan aproximadamente el 91 por ciento de todo el tequila que se vende fuera de México: Estados Unidos (84.16 %), Alemania (2.11 %), España (1.55 %), Japón (1.45 %) y Canadá (1.39 %).
Ante esta alta demanda, ¿cómo se logra mantener la misma calidad en cada rincón del planeta? Pues bien, así como sucede con otros productos de categoría internacional, como la champaña o el queso manchego, el tequila posee lo que se conoce como una Denominación de Origen (DO). Este término designa a un producto como originario de una región geográfica específica, y cuya calidad o características pertenecen exclusivamente a dicha región.
Los productos que poseen esta distinción se caracterizan por cumplir con altos estándares de calidad y, sobre todo, de autenticidad. Las denominaciones de origen están protegidas por diferentes normas y leyes nacionales e internacionales, y su propósito es fomentar la economía de las regiones que producen artículos como la champaña (oriunda del viñedo de Champagne), el queso manchego (zona geográfica La mancha de Albacete, Cuenca, Ciudad Real y Toledo, España) y, por supuesto, el tequila (cinco estados de la República Mexicana). Gracias a estas medidas, se combate la piratería y la proliferación de imitaciones de mala calidad.
La Denominación de Origen del Tequila
La Denominación de Origen del Tequila (DOT) garantiza que todo el tequila que se produce en México cumpla con estrictos estándares de calidad, autenticidad y trazabilidad, desde la plantación de agave hasta la elaboración de la bebida. Según datos oficiales del gobierno mexicano, la (DOT) protege la producción tequilera de 181 municipios en cinco estados:
Jalisco – 125 municipios
Michoacán – 30 municipios
Tamaulipas – 11 municipios
Nayarit – 8 municipios
Guanajuato – 7 municipios
La denominación se estableció exclusivamente en dichos estados por reunir las características idóneas para cultivar el Agave Azul, además de sus tradicionales procesos de producción que se han empleado por generaciones para producir tequila. Según lo indica el CRT, los factores que influyen en la DOT son los siguientes:
Zona geográfica delimitada: 181 municipios en cinco estados de la república mexicana.
Técnicas de producción: tradiciones y oficios específicos que se transmiten de generación en generación.
El tipo de agave: El Agave Tequilana Weber variedad azul es la única especie de Agave permitida para la elaboración de tequila.
El clima: Climas mayormente templados, con precipitación media.
El suelo: Suelos de texturas variables, con un PH de 5.5 a 7, con materia orgánica promedio de 2.5 % a 4.9 %.
La Declaratoria General de Protección a la Denominación de Origen “Tequila” se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 9 de diciembre de 1974, iniciando así su protección en México; ésta fue la primera Denominación de Origen de las 18 que hay actualmente en territorio mexicano. Actualmente, la DOT se encuentra protegida y regulada por normas y legislaciones como la ley de propiedad intelectual, en su artículo 156; la Norma Oficial Mexicana NOM 006; así como diversos convenios con países y organismos internacionales. En su calidad de titular de la DOT, el gobierno mexicano puede ejercer –en los países que la reconocen– acciones legales en contra de cualquiera que imite o use el nombre “tequila” sin autorización.
La DOT es reconocida en 57 países. Canadá fue el primer país en hacerlo, en 1979; en 1997, México y la Unión Europea acordaron el reconocimiento mutuo y la protección de sus respectivas Denominaciones de Origen; y en 2017, Estados Unidos se sumó a la lista, lo que impulsó con mayor fuerza la popularidad del tequila a nivel internacional.
Las denominaciones de origen son sumamente importantes para proteger, promover y fortalecer la venta de productos como el tequila, diferenciándolos de imitaciones y falsificaciones. Los consumidores, indican los datos, parecen apreciarlo en gran medida: de acuerdo con el estudio “Sistemas voluntarios de etiquetado de alimentos” (“Voluntary food labelling schemes study”), publicado por la Unión Europea, “en promedio, alrededor del 60 % de los encuestados elegiría un producto con un logotipo relacionado con el origen, incluso si es casi un 30 % más caro que un producto normal”.
¿Cuál es la labor del Consejo Regulador del Tequila?
El CRT es una organización civil, sin fines de lucro, que agrupa a los diferentes jugadores de la cadena Agave Tequila: productores de agave, productores de tequila, embotelladores, distribuidores, comercializadores y agencias gubernamentales. Asimismo, es el organismo encargado de inspeccionar, analizar y certificar que el tequila cumpla con todas las normas establecidas, salvaguardando así su denominación de origen y garantizando al consumidor la autenticidad de la bebida que consume.
Además de trabajar arduamente para combatir la falsificación y la piratería, el CRT también promueve la sostenibilidad y la responsabilidad social en la producción del tequila, implementando programas para reducir el consumo de agua, generar energía renovable y minimizar la huella de carbono. Muestra de ello es el lanzamiento de su estrategia de sustentabilidad, con metas establecidas a realizarse entre los años 2025 y 2030.
El CRT también es uno de los responsables de otorgar la DOT a nuevos productores de Tequila. Entre sus requisitos se encuentran, primero que nada, estar ubicado en uno de los cinco estados del territorio protegido. Segundo, habrá que contar con la tecnología, los controles y la capacidad técnica correspondientes. El CRT realiza un dictamen técnico en cada destilería y, posteriormente, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial autoriza el uso de la palabra “tequila” y de la marca NOM (Norma Oficial Mexicana) por un periodo de 10 años. Una vez obtenida la autorización, las destilerías estarán sujetas a inspecciones y verificaciones constantes por parte del CRT.
El Tequila: legado y razón de negocio
Tal como lo reportan los medios especializados, el impacto económico del tequila es sustancial. La industria genera empleos para más de 100 mil familias y tiene un valor estimado de mercado de alrededor de 7 mil 200 millones de dólares. Las exportaciones también son de llamar la atención, alcanzando 416 millones de litros y generando 3 mil 300 millones de dólares en ingresos.
Desde su reconocimiento en 1974, el tequila ha recorrido un largo camino para convertirse en un símbolo internacional de calidad y autenticidad. Este 2024 se conmemoraron los 50 años de la Denominación de Origen Tequila, así como 30 años de la creación del Consejo Regulador del Tequila, y las cifras no mienten: hoy por hoy, la Denominación de Origen del Tequila es patrimonio nacional. Además de contribuir a preservar la historia, tradiciones y raíces de México, proteger al tequila promueve la economía y mejora la calidad de vida de miles de familias en regiones del país donde es fundamental fomentar el empleo y activar el crecimiento económico. En pocas palabras, el tequila es un legado de nuestra historia, pero también lo será de nuestro futuro, y es por eso que resulta imperativo preservarlo, protegerlo, y trabajar para garantizar su sustentabilidad.